Reovirus aviares en granjas avícolas de Brasil. El reovirus aviar (ARV) está muy diseminado en las granjas avícolas comerciales brasileñas y causa artritis/tenosinovitis viral, síndrome de retraso de enanismo infeccioso y síndrome de malabsorción en diferentes tipos de aves de carne y huevos (reproductoras, pollos de engorde, parrillas y ponedoras). En Brasil, la infección por reovirus aviares se describió por primera vez en pollos de engorde en la década de 1970, pero no se consideró un problema importante de salud avícola durante décadas. En los últimos años se ha observado un resultado más preocupante de las infecciones de campo, incluidos los decomisos en las plantas de procesamiento debido a la apariencia antiestética de las partes del cuerpo de los pollos, principalmente las patas. Los análisis del desempeño de las parvadas avícolas han evidenciado pérdidas económicas adicionales para las granjas. La caracterización genética y antigénica de las cepas de campo de reovirus aviares de Brasil demostró una gran diversidad de linajes que circulan en todo el país, incluidos cuatro de los cinco grupos filogenéticos principales descritos anteriormente (I, II, III y V). Todavía no está claro si todos ellos están asociados con diferentes enfermedades que afectan el rendimiento de las parvadas en las aves de corral brasileñas. Las infecciones por reovirus aviares se han controlado en granjas avícolas brasileñas mediante la inmunización de reproductores y pollitos jóvenes con cepas vacunales vivas comerciales clásicas (S1133, 1733, 2408 y 2177) utilizadas en otras partes del hemisferio occidental. Sin embargo, las variaciones genéticas y antigénicas de los aislamientos de campo han impedido una protección adecuada contra enfermedades asociadas, por lo que se están produciendo vacunas autógenas inactivadas a partir de aislamientos obtenidos en granjas específicas. En conclusión, las variantes de campo de ARV son un desafío continuo para la avicultura en Brasil. La vigilancia epidemiológica combinada con análisis de biología molecular de las muestras de campo, así como el desarrollo de cepas de vacunas dirigidas a las variantes circulantes de los reovirus aviares, son necesarias para controlar este patógeno avícola económicamente importante.