Antecedentes: El trauma sexual militar (MST por sus siglas en inglés) que involucra agresión sexual (a diferencia de una experiencia en la que únicamente hubo acoso) está asociado con una función sexual más pobre en las mujeres militares activas o veteranas de los EE. UU. (SM/Vs por sus siglas en inglés). La teoría de la función sexual sugiere que la presencia de una mayor severidad de la depresión y de autoesquemas sexuales más negativos pueden contribuir con la disfunción sexual. Esto aún tiene que ser examinado en mujeres SM/Vs que tengan parejas sobrevivientes a MST.Objetivo: Usando el análisis de ruta, el presente estudio examinó la asociación del tipo de MST (ej., ninguno, solo acoso, agresión), depresión, autoesquemas sexuales y función sexual en 818 mujeres SM/Vs con pareja.Método: Se evaluaron tres modelos de mediación distintos, todos probando efectos indirectos de la depresión y los autoesquemas sexuales en la asociación del tipo de MST y la función sexual. En el Modelo 1, el modelo de mediación asumía que la exposición al MST predecía una depresión más severa, lo que a su vez predecía autoesquemas sexuales más negativos. Los auto- esquemas sexuales más negativos, a su vez, predecian una función sexual más probre. En el Modelo 2, el modelo de mediación asumía que la exposición al MST predecía autoesquemas sexuales más negativos, lo cual entonces predecía una depresión más severa. La depresión más severa, a su vez, predecía una función sexual más pobre. En el Modelo 3, el modelo de mediación asumía una mediación paralela en que la exposición al MST predecía depresión más severa y autoesquemas sexuales más negativos, los que a su vez, predecían una funcion sexual más pobre.Resultados: El mejor modelo de ajuste sugirió una mediación de mayor severidad de la depresión (estimación:-1.30, intervalo de confianza: −1.91, −.69) y auto-esquemas sexuales más negativos (estimación: −2.09, intervalo de confianza: −2.94,-1.24) en la asociación de la agresión MST y función sexual más pobre (Modelo 3). El haber presentado una experiencia únicamente de acoso no tuvo relación con la función sexual a través de las vías mediadas.Conclusiones: Las intervenciones para mejorar la función sexual entre las sobrevivientes del MST que experimentaron agresión deberían abordar los autoesquemas sexuales negativos relacionados con el rendimiento sexual y los síntomas depresivos. Las intervenciones cognitivo-conductuales que incluyen el debate de cogniciones desadaptativas pueden ser adecuadas para abordar esta necesidad clínica.