RESUMO
Después de haber observado que los pacientes diabéticos tienen elevadas las concentraciones plasmáticas de bilirrubina conjugada y de ácido glucurónico y conociendo que éste forma parte de la estructura química de los glucosaminoglicanos (ácido hialurónico, heparina y condroitín), que a su vez forman parte de la estructura de los capilares, vasos de mayor calibre y tejido conectivo, planteamos la hipótesis de que las elevaciones de las concentraciones de ácido glucurónico originan la elevación de los niveles de glucosaminoglicanos, y de que éstos intervienen en forma fundamental en las lesiones vasculares que presentan como complicación crónica los pacientes con diabetes mellitus. Se trató a 10 ratas Wistar con ácido glucurónico (30 mg) en 50 ml de agua para beberlo ad livitum por tiempo sin definir. A los 60 días, todas las ratas estaban ciegas y no respondían a estímulos luminosos. Estudios de oftalmoscopia, anatomopatológicos del ojo y riñón y de microscopia electrónica del riñón confirmaron la presencia de lesiones vasculares con formación de edema, congestión de vasos, microaneurismas y hemorragias, y en todos los estudios se encontró engrosamiento de membrana basal. Se concluye que el ácido glucurónico suministrado oralmente a ratas es capaz de reproducir las lesiones vasculares que como complicación crónica presenta las personas con diabetes mellitus