RESUMO
Resumen Objetivo: Evaluar la factibilidad y los efectos sobre la capacidad funcional de un programa de entrenamiento físico supervisado, aplicado en pacientes con disfunción sistólica severa del ventrículo izquierdo después de infarto agudo de miocardio. Métodos: Se estudiaron 37 pacientes, de ambos sexos y sin límites de edad, con diagnóstico de disfunción sistólica severa del ventrículo izquierdo, después de haber sufrido un infarto agudo de miocardio, que consecutivamente se incorporaron al programa ambulatorio del Centro de Rehabilitación del Instituto de Cardiología. Se hicieron pruebas de esfuerzo máximas limitadas por síntomas con determinación de consumo de oxígeno, ecocardiogramas en reposo y ventriculografías isotópicas en reposo y esfuerzo a los 2, 8 y 18 meses de evolución, y un tiempo medio de seguimiento clínico de 4,1 años. A todos se les prescribió un régimen de entrenamiento físico moderado o intenso, durante un año como mínimo. Se consideró disfunción sistólica severa cuando la fracción de eyección del ventrículo izquierdo fue menor de 35%. Resultados: Todos los parámetros ergométricos que expresaron capacidad funcional incrementaron significativamente en la evaluación del octavo mes (p< 0,0005), permaneciendo invariables a los 18. La fracción de eyección del ventrículo izquierdo media en reposo inicial fue de 28,3 ± 5,3%, la cual no mostró variaciones significativas con el esfuerzo ni con otros estudios evolutivos. La mortalidad total y la morbilidad de la serie fueron de 10,5% y 47,3%, respectivamente. Conclusión: El entrenamiento físico supervisado en pacientes infartados con disfunción sistólica severa de ventrículo izquierdo fue seguro y efectivo, y mejoró su calidad de vida, sin causar efectos negativos sobre la función ventricular.
Abstract Objective: To evaluate the feasibility and effects on the functional capacity of a supervised physical training programme carried out on patients with severe left ventricular systolic dysfunction after an acute myocardial infarction. Methods: The study included a total of 37 patients, males and females of any age, with a diagnosis of severe left ventricular systolic dysfunction after having suffered an acute myocardial infarction. They were consecutively included into the ambulatory programme of the Institute of Cardiology Rehabilitation Centre. Maximum effort tests, limited by symptoms, were performed to determine oxygen consumption. Echocardiograms were also performed at rest, with isotopic ventriculography at rest and then at 2, 8, and 18 months. The mean clinical follow-up was 4.1 years. They were all prescribed to a moderate or intense training programme for at least one year. Severe left ventricular systolic dysfunction was considered when the left ventricular ejection fraction was less than 35%. Results: All the ergometric parameters that expressed functional capacity increased significantly in the evaluation at 8 months (P< .0005), and remained at 18 months. The initial mean left ventricular ejection fraction at rest was 28.3 ± 5.3%, which showed no significant changes with effort or in the other evaluation times. The overall mortality and morbidity of the series was 10.5% and 47.3%, respectively. Conclusion: Supervised physical training in patients after an acute myocardial infarction and with severe left ventricular systolic dysfunction was safe and effective, and improved the quality of life, without causing negative effects on ventricular function.