RESUMO
La lipoproteína de alta densidad (HDL) posee propiedades antinflamatorias, antioxidantes y antitrombóticas. Niveles bajos de HDL en pacientes que se recuperan de un infarto se asocian a un pronóstico desfavorable y durante los procesos de isquemia y reperfusión está establecido su importante papel en el daño tisular. Se evaluaron 59 pacientes que ingresaron con síntomas clínicos de enfermedad aterotrombótica aguda cardiaca y cerebral (36 con baja HDL y 23 con niveles normales), con el objetivo de medir los niveles de proteína C reactiva ultrasensible (PCR Us) al ingreso y a las 48 horas y para determinar a los tres meses, la resistencia a la insulina (The Homeostasis Model Assessment o cálculo de HOMA) y los niveles de malonildialdehído (MDA). Los pacientes con baja HDL presentaron niveles más altos de PCR y un pico a las 48 horas, que no se observó en el grupo con HDL normal. Los niveles de MDA en pacientes con bajo HDL fueron mayores y el HOMA fue positivo en el 73 por ciento de las mujeres con enfermedad aterotrombótica aguda y con HDL baja y en el 65 por ciento de los hombres con HDL baja. Se concluyó entonces que la inflamación es mayor a las 48 horas del evento agudo en pacientes con HDL baja, cuando ocurren isquemia y reperfusión tardía, que el estrés oxidativo (MDA) continúa elevado a los tres meses de tratamiento, a pesar del tratamiento con estatinas que no logra elevar los niveles de HDL y que la resistencia a la insulina está presente en un gran porcentaje de los pacientes que evolucionan con una HDL disfuncional, que no ejerce su función antinflamatoria y antioxidante.