RESUMO
Objetivo: analizar la relación entre vulnerabilidad social y conductas sexuales de riesgo en un grupo de adolescentes chilenos. Materiales y métodos: estudio transversal en adolescentes de la comuna Chiguayante, región del Bío-Bío, Chile, año 2009. La muestra fue de 297 adolescentes, 154 mujeres y 143 varones. Se utilizó la ficha CLAP OPS/OMS y un instrumento de vulnerabilidad social y conducta sexual. Se aplicó t-Student y Ji 2 (p < 0,05). Resultados: la edad promedio fue 16,5 ± 1,5 años en varones y 16,4 ± 1,5 mujeres. El 63% vive con ambos padres. El 74% describe sus relaciones familiares como buenas y excelentes. El 44% de los adolescentes que han iniciado actividad sexual definen sus relaciones familiares como regulares, malas o sin relación frente al 20% que no ha iniciado actividad sexual (p = 0,033); el 62% de los adolescentes que han iniciado actividad sexual percibe escaso o nulo apoyo familiar frente al 42% de los adolescentes que no han iniciado actividad sexual (p = 0,0031). El 51% señala que hay delincuencia en su entorno social próximo. No hubo diferencias significativas al asociar variables de vulnerabilidad social con uso de métodos anticonceptivos y el número de parejas sexuales. Las relaciones sexuales asociadas al consumo de alcohol y drogas fueron superiores en varones (21%) que en mujeres (10%) (p = 0,019); las relaciones sexuales sin protección fueron superiores en mujeres (35%) que en varones (20%) (p = 0,05).Conclusión: se reconoce la importancia de la familia en el proceso de formación de la conducta sexual de las y los adolescentes.
Objective: Analyzing the relationship between social vulnerability and risky sexual conduct in a group of Chilean adolescents. Materials and methods: This was a crosssectional study of adolescents living in the Chiguayante commune in the Bío-Bío region of Chile, during 2009. The sample consisted of 297 adolescents (154 female, 143 male). PAHO/WHO Latin-American Perinatology Centre record cards and a social vulnerability and sexual conduct instrument were used. Students t-test and the chi-square test (p < 0.05) were used for analyzing the data. Results: Average age was 16.5 ± 1.5 years for males and 16.4 ± 1.5 for females; 63% lived with both parents, 74% described their family relationships as being good and/or excellent. 44% of the adolescents in the study who had begun sexual activity defined their family relationships as regular, poor or lacking compared to 20% who had not begun sexual activity (p = 0.033). 62% of the adolescents who had begun sexual activity perceived very limited or no family support compared to 42% of them who had not initiated sexual activity stating the same (p = 0.0031). 51% stated that there was delinquency in their close social setting. There were no significant differences when associating social vulnerability with using conceptive methods and number of sexual partners. Sexual relationships associated with drinking alcohol and taking drugs was greater in males (21%) than in females (10%) (p = 0.019). Engaging in unprotected sexual relationships was greater in females (35%) than in males (20%), (p = 0.05).Conclusion: It was recognized that the family played an important role in forming adolescents' sexual conduct.