RESUMO
El estado nutricional de los adultos mayores es la resultante de sus condiciones de vida y de salud. El aumento demográfico de este segmento de población es un reto a los profesionales de la salud, para lograr conocer cuales son las características de normalidad en esta etapa de la vida. Objetivo general: Conocer el estado nutricional de la población de adultos mayores beneficiarios del programa ASOMA, e identificar desde un enfoque cualitativo, sus patrones alimentarios. Material y métodos:. Estudio descriptivo, correlacional, transversal y de campo. Universo: 10214 ancianos beneficiarios de tres programas alimentarios. Muestreo: aleatorio estratificado. Tamaño de la muestra: 387 ancianos. Respetando la proporcionalidad del universo, Programa ASOMA n=162. Técnicas: Observacionales y medicionales (antropométricas). Ecuaciones: Chumlea para estimar talla a partir de la altura de la rodilla e Indice de Masa Corporal IMC. Conclusiones: El grupo estudiado (n=162) estuvo representado en sus 2/3 partes por el sexo femenino (n=108), perteneciendo en su mayoría a la categoría de viejos-jóvenes (personas de 60- 69 años de edad), con características de pobreza estructural en sus indicadores socioeconómicos: bajo nivel de escolaridad (analfabetismo funcional: 75 por ciento), ingresos temporarios, por debajo de $ 200 mensuales, provenientes en la mitad de los casos de la ayuda familiar. La cuarta parte de los ancianos aún trabaja. Más de la mitad de los ancianos eran propietarios de la vivienda que habitaban, que compartian en el 86 por ciento de los casos con sus familiares. Los alimentos básicos de la dieta eran predominantemente energéticos (pan, azúcar y aceite), y los alimentos de consumo frecuente fueron el arroz y la carne de pollo. Vegetales de los tres grupos, la carne de vaca y frutas del grupo "A" aparecen en sus dietas en menor proporción y frecuencia. El 83,9 por ciento de los ancianos tiene una dieta monótona (consumo semanal de ú5 alimentos diferentes), recibidos en el bolsón alimentario del programa ASOMA. La media del IMC fue de 27,4 kg/m2 con un desvío estándar de 5,33, siendo los valores extremos encontrados de 16,20 y de 46,60. El 24,1 por ciento de la población se ubicó en valores de IMC que indican normalidad en el estado nutricional de los ancianos Los valores de IMC según sexo mostraron en hombres un agrupamiento de los datos alrededor de valores normales y colindantes (malnutrición leve por déficit y por exceso). En mujeres, los... (Au)
Assuntos
Humanos , Masculino , Feminino , Pessoa de Meia-Idade , Idoso , Estado Nutricional , Planejamento em Saúde/métodos , Política Nutricional , Programas de Nutrição , Dieta , Índice de Massa Corporal , Composição Corporal , Idoso de 80 Anos ou mais , Fatores Socioeconômicos , Estudos Transversais , ArgentinaRESUMO
El estado nutricional de los adultos mayores es la resultante de sus condiciones de vida y de salud. El aumento demográfico de este segmento de población es un reto a los profesionales de la salud, para lograr conocer cuales son las características de normalidad en esta etapa de la vida. Objetivo general: Conocer el estado nutricional de la población de adultos mayores beneficiarios del programa ASOMA, e identificar desde un enfoque cualitativo, sus patrones alimentarios. Material y métodos:. Estudio descriptivo, correlacional, transversal y de campo. Universo: 10214 ancianos beneficiarios de tres programas alimentarios. Muestreo: aleatorio estratificado. Tamaño de la muestra: 387 ancianos. Respetando la proporcionalidad del universo, Programa ASOMA n=162. Técnicas: Observacionales y medicionales (antropométricas). Ecuaciones: Chumlea para estimar talla a partir de la altura de la rodilla e Indice de Masa Corporal IMC. Conclusiones: El grupo estudiado (n=162) estuvo representado en sus 2/3 partes por el sexo femenino (n=108), perteneciendo en su mayoría a la categoría de viejos-jóvenes (personas de 60- 69 años de edad), con características de pobreza estructural en sus indicadores socioeconómicos: bajo nivel de escolaridad (analfabetismo funcional: 75 por ciento), ingresos temporarios, por debajo de $ 200 mensuales, provenientes en la mitad de los casos de la ayuda familiar. La cuarta parte de los ancianos aún trabaja. Más de la mitad de los ancianos eran propietarios de la vivienda que habitaban, que compartian en el 86 por ciento de los casos con sus familiares. Los alimentos básicos de la dieta eran predominantemente energéticos (pan, azúcar y aceite), y los alimentos de consumo frecuente fueron el arroz y la carne de pollo. Vegetales de los tres grupos, la carne de vaca y frutas del grupo "A" aparecen en sus dietas en menor proporción y frecuencia. El 83,9 por ciento de los ancianos tiene una dieta monótona (consumo semanal de £5 alimentos diferentes), recibidos en el bolsón alimentario del programa ASOMA. La media del IMC fue de 27,4 kg/m2 con un desvío estándar de 5,33, siendo los valores extremos encontrados de 16,20 y de 46,60. El 24,1 por ciento de la población se ubicó en valores de IMC que indican normalidad en el estado nutricional de los ancianos Los valores de IMC según sexo mostraron en hombres un agrupamiento de los datos alrededor de valores normales y colindantes (malnutrición leve por déficit y por exceso). En mujeres, los...