RESUMEN
Resumen ANTECEDENTES: La coexistencia de neoplasias mieloproliferativas durante el embarazo puede derivar en complicaciones para la madre y el feto, de ahí la indispensable necesidad de detectarlas oportunamente. CASO CLÍNICO: Paciente de 30 años, primigesta. En el control prenatal se detectó una elevación significativa de plaquetas y leucocitos. Luego de descartar un proceso infeccioso e interconsulta con el hematólogo se le indicó un antiagregante plaquetario. El embarazo transcurrió sin complicaciones de tipo trombótico o hemorrágico y finalizó mediante cesárea a las 40 semanas, indicada por falta de progresión del trabajo de parto. Posteriormente se inició el tratamiento específico para la enfermedad y seguimiento. METODOLOGÍA: La búsqueda de artículos publicados durante los últimos 20 años se efectuó en las bases de datos PubMed y Clínical Key con los MeSH "essential thrombocytemia AND pregnancy", "hematological neoplasms AND pregnancy". RESULTADOS: Se obtuvieron 14 artículos de los que se excluyeron 3 por no incluir a mujeres embarazadas. La revisión final fue de 11 artículos. CONCLUSIONES: El seguimiento correcto del control prenatal permite advertir las complicaciones médicas independientes del embarazo. Cuando así sucede es posible la intervención oportuna y la participación de otros especialistas que confirmen el diagnóstico para, en conjunto, tomen la mejor decisión en beneficio de la madre y su hijo por nacer.
Abstract BACKGROUND: The coexistence of myeloproliferative neoplasms during pregnancy may lead to maternal and fetal complications, and early detection is essential. CLINICAL CASE: A 30-year-old primigravida. Prenatal examination revealed a significant increase in platelets and leukocytes. After exclusion of an infectious process and consultation with the haematologist, she was prescribed an antiplatelet agent. The pregnancy proceeded without thrombotic or haemorrhagic complications and was terminated by caesarean section at 40 weeks, indicated for lack of progress in labour. Specific treatment of the disease and follow-up were then initiated. METHODOLOGY: Articles published in the last 20 years were searched in PubMed and Clinical Key databases using MeSH "essential thrombocythemia AND pregnancy", "haematological neoplasms AND pregnancy". RESULTS: We obtained 14 articles, of which 3 were excluded because they did not include pregnant women. The final review consisted of 11 articles. CONCLUSIONS: Correct follow-up of antenatal care can warn of medical complications independent of pregnancy. In this case, timely intervention and involvement of other specialists is possible to confirm the diagnosis and make the best joint decision for the benefit of the mother and her unborn child.