RESUMEN
Los autores acometen el estudio de las fracturas por estrés mecánico en personas que realizan ejercicios de manera ocasional, como una forma de mantenimiento físico o con una finalidad terapéutica, debido a que este tipo de fractura se ha incrementado, sobre todo en la tercera edad. El retardo en el diagnóstico o el error que se produce con frecuencia, al confundirla con una enfermedad tumural ósea, según ellos, constituyen los principales problemas que al respecto deben enfrentar los médicos que atienden a estos pacientes. Revisaron las historias clínicas de 21 pacientes afectos de este tipo de fractura que practicaban algún tipo de ejercicio no competitivo. Las edades del grupo de estudio oscilaron entre los 7 y los 62 años. La localización de las fracturas (preferentemente en los metatarsianos), el predominio del sexo femenino, los factores de riesgo (práctica del deporte sobre un terreno duro, el empleo de calzado inapropiado, la reciente incorporación a la práctica deportiva y la obesidad), así como la forma de presentación, son los resultados más significativos. Estos hallazgos le permitieron concluir que este tipo de fractura no es privativo sólo de quienes practican deportes competitivos y que puede presentarse a cualquier edad. Esto debe ser tenido muy en cuenta por el personal médico para poder determinar a tiempo su diagnóstico(AU)