RESUMEN
BACKGROUND: There are evident risks factors stemming from any the local post-surgical infection, which merits analysis of morbidity derived from conservative and radical surgery after treatment of the operable breast cancer. STUDY DESIGN: 107 patients with breast cancer recruited between November 1995 and October 1997 were evaluated. From that total, 36 patients were subjected to quadrantectomy, axillary lymphadenectomy and postoperative radiation while 71 patients were subjected to modified radical mastectomy. RESULTS: 7 % percent of patients who underwent modified radical surgery succumbed to postoperative local infection vs. 17 % of patients subjected to breast conserving therapies. Local infections were associated with the older patients (63 vs. 54 years old, p=0.03) and greater obesity (p=0.04). Upon logistic regression analysis conservative surgery exhibited adjusted Odds Ratio of 6.42 (1.27-32.28), p =0.02. In postoperative infection group average hospital stay increased by 6 days (p= 0.0001). CONCLUSION: In the present study main risk factors associated with postsurgical wound infection after breast cancer treatment proved to be advanced age, greater obesity and conservative surgery. Nonetheless, more studies are necessary to confirm current findings.
Asunto(s)
Neoplasias de la Mama/cirugía , Infección de la Herida Quirúrgica/etiología , Femenino , Humanos , Tiempo de Internación , Mastectomía/efectos adversos , Mastectomía/métodos , Persona de Mediana Edad , Obesidad , Factores de RiesgoRESUMEN
Objetivo: Evaluar la relación entre los niveles de hormona de crecimiento al nacimiento y a la edad de 9 años con la presión arterial del niño Material y métodos: Estudio prospectivo de seguimiento longitudinal (desde nacimiento hasta los 9 años de edad). Setenta y seis niños que nacieron en el Hospital Universitario Príncipe de Asturias durante 1990-1991 con mediciones funiculares de GH, IGF-I y glucosa, de estos 76, un niño falleció al año de vida por meningitis y 51 niños aceptaron participar. Se midió la presión arterial, antropometria del niño de 9 años y niveles séricos de GH, IGF-I y glucosa. Resultados: La presión arterial sistólica del niño de 9 años se asocia inversamente a los niveles fetales de GH (p = 0,002) y directamente con los parámetros antropométricos a la edad de 9 años (p = 0,004). Conclusiones: Estos resultados apoyan la hipótesis de que los desórdenes de la presión arterial pueden comenzar en el feto, en donde los niveles fetales de hormona de crecimiento tienen una relevancia fundamental (AU)
Asunto(s)
Femenino , Masculino , Humanos , Recién Nacido , Desarrollo Fetal/fisiología , Monitoreo Fetal/métodos , Presión Sanguínea/fisiología , Antropometría/métodos , Biomarcadores/análisis , Feto/fisiopatología , Feto/patología , Análisis de Regresión , Hormona de Crecimiento Humana/análisis , Hormona de Crecimiento Humana/fisiología , Pruebas de Función Placentaria/métodos , Estudios Prospectivos , Edad Gestacional , Índice de Masa Corporal , Radioinmunoensayo/métodosRESUMEN
Objetivo: Evaluar la relación de la presión arterial del niño de 9 años con el colesterol fetal. Material y métodos: Estudio prospectivo de seguimiento longitudinal (desde nacimiento hasta los 9 años de edad). De un total de 76 niños nacidos en el Hospital Universitario Príncipe de Asturias durante 1990-1991 con mediciones funiculares de colesterol, triglicéridos y glucosa, un niño falleció al año de vida por meningitis y 51 aceptaron participar. Se midió la presión arterial, antropometría del niño de 9 años y mismos valores séricos cuantificados al nacimiento. Resultados: La edad media de los niños incluidos en el estudio fue de 8,7 ñ 0,4 años. El peso medio fue de 32,15 ñ 8,16 kg, la talla de 1,34 ñ 0,06 m y el IMC de 17,56 ñ 3,18 kg/m2, perímetro craneal de 52,23 ñ 3,13 cm, pliegue cutáneo subescapular de 7,64 ñ 5,55 mm y el tricipital de 7,42 ñ 4,46. La presión arterial sistólica fue de 87,2 ñ 8,52 mmHg y la diastólica de 55,02 ñ 6,16 mmHg. Tanto la presión arterial sistólica (R = 0,39; p = 0,004) como la diastólica (R = 0,40; p = 0,003) se asociaron de forma positiva al índice de masa corporal del niño de 9 años, pero ésta no fue significativa con los parámetros antropométricos del neonato. La presión arterial sistólica del niño de 9 años se asoció de forma positiva con los valores de colesterol fetal (R = 0,34; p = 0,02). Conclusiones: Estos resultados apoyan la hipótesis de que las alteraciones de la presión arterial pueden comenzar en el feto, donde los valores de colesterol pueden tener una relevancia fundamental (AU)