RESUMEN
BACKGROUND: Obesity and the metabolic syndrome affect a considerable segment of the population worldwide, including health professionals. In fact, several studies have reported that physicians tend to have more cardiovascular risk factors than their patients. The present cross-sectional study assessed whether the Health Sciences students had a healthier lifestyle, thus could have a more preventive attitude towards chronic diseases than the general population. MATERIALS AND METHODS: Students of the medical-biological areas were surveyed by answering a questionnaire about familiar cardiovascular risk factors, personal smoking, alcohol drinking, dietary and exercise habits. Blood pressure was also measured, along with weight, height, and abdominal circumference. RESULTS: 23.4% of the participants were overweight and 10% obese. Parental obesity was the most frequent risk factor, followed by social drinking and smoking. We found high consumption of animal derived foods, breakfast- like cereals, pastries, white bread and sweetened beverages; while low intake of fruit and vegetables were reported. More than half the sample reported to practice very little or no exercise at all. DISCUSSION AND CONCLUSIONS: We found similar or even higher rates of risk factors than the average population, that may eventually lead to the development of chronic cardiometabolic diseases. Thus we can infer that biomedical education is inefficient in inducing healthy lifestyles among biomedical students, which could have impact in their future practice as they will most probable become obese health-professionals, thus fail to effectively treat their own patients.
Introducción: La obesidad y el síndrome metabólico afectan a un segmento considerable de la población mundial, incluyendo a los profesionales de la salud. De hecho, diversos estudios han reportado que los médicos tienden a presentar más factores de riesgo cardiovascular que sus propios pacientes. El presente estudio transversal evaluó si los estudiantes del área de la salud tenían un estilo de vida más saludable y, por tanto, una mejor actitud en cuanto a la prevención de las enfermedades crónico-degenerativas, que el resto de la población. Materiales y métodos: Se encuestaron estudiantes del área medico-biológica a través de un cuestionario sobre antecedentes heredo-familiares de riesgo cardiovascular, consumo actual de tabaco y alcohol, así como hábitos alimentarios y de ejercicio físico. Se midió la presión arterial, el peos, la talla y la circunferencia abdominal. Resultados: 23.4% de los participantes presentaban sobrepeso y 10% obesidad. La obesidad paterna fue el factor de riesgo más frecuente, seguido de consumo social de alcohol y tabaquismo. Se encontró un alto consume de alimentos de origen animal, cereales industrializados y refrescos; por otra parte, se reportó un bajo consumo de verduras y frutas. Más de la mitad de la muestra refirió ser sedentario. Discusión y conclusiones: Se encontraron datos muy similares a aquéllos reportados sobre la población general, que eventualmente conducirán al desarrollo de enfermedades cardiometabólicas. Por tanto, es posible inferir que la educación biomédica no es eficiente en la inducción de un estilo de vida saludable entre los estudiantes de ciencias de la salud. Tal fenómeno podría impactar su práctica futura ya que probablemente se convertirán en profesionistas obesos, con la consecuente falla en la prevención primaria y secundaria de sus propios pacientes.